EL EVANGELIO DEL REINO
Amada Iglesia de Dios en
Jesús el Cristo: El Evangelio del Reino, no es otra cosa que predicar y
proclamar con la fuerza del Espíritu Santo que el regreso de Jesús el Cristo a
la tierra está muy próximo y que El viene sobre las nubes rodeado de su
Ejercito Celestial, a Reinar aquí en este mundo gobernado por el príncipe de
las tinieblas, que ya está vencido, Jesús lo venció en la cruz del calvario;
Colosenses 2:13-15; Romanos 14:8-9; Hebreos 2:14. Bendito es Jesús ¡El venció
en la cruz a la muerte y al que tenía el imperio de la muerte; Hebreos 2:14.
Estamos viendo con claridad
contundente las Profecías sobre “las señales preliminares de los tiempos del
fin”. Atalayas de Dios; fijemos nuestros ojos en Jesús el Cristo; velemos,
oremos y en santidad preparémonos para el glorioso regreso de nuestro Rey
eterno, que es inminente. “El Evangelio del Reino; Mateo 24:14; es la revelación final; el
libro del Apocalipsis”. El otro aspecto del Evangelio del Reino que también es
fundamental, es que debemos comprender que Jesús el Cristo debe reinar primero
en nuestros corazones y así andar en la santidad del Espíritu; entendamos que
nuestros cuerpos son el Templo de Dios, el Evangelio de Juan 14:3 nos dice: “Y
si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomare a mí mismo, para
que donde Yo estoy, vosotros también estéis”, ESTO HAY QUE REPETIRLO Y
MARTILLARLO MUCHAS VECES, NO HAY NADA MAS IMPORTANTE PARA EL SEÑOR QUE LA
SANTIDAD.
Esto es algo glorioso y
divino, El viene por nosotros, su verdadera Iglesia, la novia del cordero, su
Iglesia Gloriosa, “Que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que
fuese santa y sin mancha”; Efesios 5:27, donde EL se va a manifestar con poder;
el mismo poder que se manifestó en Elías y Moisés, la Compañía del Hijo Varón,
sus Consagrados, sus Vencedores, el Glorioso Ejercito de Dios, Joel 2:1-11; los
dos olivos y los dos candeleros; Jesucristo y su Iglesia Gloriosa, son los
fundamentos de los dos testigos del Apocalipsis 7 y 11. Cuando veamos estos
acontecimientos, el mundo entero temblara, y todo se estremecerá; estaremos en
la semana 70 de Daniel; y nuestra única esperanza será el regreso de Jesús el
Cristo sobre las nubes, rodeado de su Ejercito Celestial, a acabar con el
pecado y la maldad de este mundo y EL Reinara con su Iglesia por toda la
Eternidad. Nuestro amado Jesús comenzó su misión predicando y proclamando el
Evangelio del Reino con la fuerza y el poder del Espíritu Santo; pero
desafortunadamente a través de la historia del Seudo Cristianismo lo que se ha
predicado es religión; que no es más que un substituto del Reino de Dios. Jesús
no vino a traer o a imponer una Religión; EL no fue un líder religioso; los
mayores opositores del Señor fueron los líderes religiosos de la época,
miembros del Sanedrín, donde estaban los Fariseos. La religión ha sido el
intento del hombre por establecer sus propios Reinos aquí en la tierra. Miremos
el caos que han creado en estos aproximadamente, 2.000 años de Apostasía,
religiones falsas, sectas, denominaciones, una en cada esquina, supermercados
de doctrinas, controladas por los hombres que no les interesa sino el dinero y
el poder, hablan de amor, pero lo único que ellos aman es el dios de este
mundo, el dinero, y así crearon sus propios reinos dominados y controlados por
ellos mismo, el mercantilismo es uno de los factores que desarrollo la
apostasía en la Iglesia; estamos viviendo una época de caos y confusión total.
El Apóstol Pablo en su carta 2 a los Tesalonicenses Capitulo 2; versículo 3;
llama a esta situación, la Apostasía y la considera como una de las señales
contundentes de los Tiempos del Fin.
Si, amados hermanos y
compañeros de milicia, como decía el Apóstol Pablo, porque el sabia que
pertenecía al Ejercito de Dios; y nosotros que estamos viviendo en los tiempos
finales, tenemos que tomar conciencia que somos miembros del Glorioso Ejercito
de Dios, y estamos predestinados a herir y aplastar la cabeza de la serpiente,
símbolo de Satanás; Génesis 3:15; Romanos 16:20; Apocalipsis 19:11-21. Con el
poder del Espíritu Santo combatiremos ardientemente con mucho amor, por la fe,
la verdad y la justicia divina; entonces vendrá la verdadera paz, que todos
anhelamos; Jesús el Cristo regresara.
El Padre Celestial, por
medio de su amado hijo Jesús el Cristo y su Espíritu Santo está restaurando su
Iglesia Gloriosa, donde EL, levantara un pueblo fuerte dispuesto para la
batalla; Joel 2:5; Apocalipsis 7 y 11; la Compañía del Hijo Varón, sus
verdaderos hijos consagrados en la santidad del Espíritu. Pero para lograrlo
tenemos que morir a nuestro YO; y decir como decía el Apóstol Pablo: “MISERABLE
HOMBRE DE MI”. Solo Jesús el Cristo pude hacer un hombre nuevo. Presentémonos
vacíos al Señor para que EL, nos llene de su Espíritu Santo y en nuestro
interior corran ríos de agua viva, y así El nos santifique con su verdad,
perfeccionando la santidad en el temor de Dios, al mismo tiempo nos santifico
con su sangre preciosísima que El derramo en la cruz del calvario por todos
nosotros, sus escogidos, sus elegidos, desde antes de la fundación del mundo le
pertenecíamos al Padre y EL nos entrego a su amado hijo, El Cordero de Dios que
quita el pecado del mundo.
Amada Iglesia de Dios,
arrepintámonos de nuestros pecados y manifestemos el carácter de Jesús el
Cristo en nuestras vidas y andemos en la santidad del Espíritu. NOS DIRIGIMOS
HACIA LA ULTIMA BATALLA DE LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD; EL ARMAGEDON;
PREPAREMONOS EN SANTIDAD, EL VIENE PRONTO. Oremos sin cesar para que el
Espíritu nos revele con claridad absoluta que los dos Testigos del Apocalipsis
7 y 11; no son solamente dos personajes; sino Jesús el Cristo y su Iglesia
Gloriosa, sus verdaderos consagrados, las 7 estrellas, sus ángeles mensajeros,
que estamos en su diestra poderosa, donde EL tiene la ley de fuego;
Deuteronomio 33:2-3; Apocalipsis 1:16; la Compañía del Hijo Varón; Apocalipsis
12:5-17; el Glorioso Ejercito de Dios, Joel 2:1-11; los llamados por el Señor
para estar en la vanguardia de su verdadera Iglesia; el Cuerpo de Cristo, sus verdaderos
Testigos, vestidos con ropas blancas y con palmas en las manos; Apocalipsis 7:
1-17. Nuestra misión es predicar y proclamar el glorioso Evangelio del Reino y
vivirlo en la santidad del Espíritu, obedeciendo sus órdenes Divinas. Y no
olvidemos nunca que Jesús encerró toda la ley en el amor; Marcos 12:28.31;
Mateo 22:34-40; Amada Iglesia pongamos en práctica la Ley Real conforme a las
Escrituras, el amor, y entonces el mundo entero temblara; Santiago 2:8-13. El
Apóstol Pablo iluminado por el Espíritu nos describe la edificación de la
Iglesia hasta llegar a la estatura del varón perfecto en Efesios 4:11-16; el
Señor lo que está haciendo es edificando su Iglesia Gloriosa, Efesios 5:27; el
Cristo colectivo manifestara su amor, su verdad, su justicia y su paz en cada
uno de nosotros miembros de su única Iglesia verdadera que es primero que todo
Espiritual, comienza dentro de cada uno de nosotros, miembros del Cuerpo de
Cristo; los verdaderos hijos del Dios vivo y verdadero, la simiente santa, sus
elegidos. La verdadera Iglesia de Dios, comienza en nuestros hogares, meditemos
a ver si realmente Jesús reina en nuestras familias; si verdaderamente hemos
muerto a nuestra soberbia, que surge del conocimiento de la letra, y nos lleva
a la religiosidad, deseos de liderazgo, orgullo, vanidad, egoísmo, avaricia,
codicia, ansias de poder, mentiras, engaños, adulterios, fornicaciones y todas
las pasiones bajas que se anidan en nuestras almas, sabemos que todos hemos
fallado en no permitir que Su Vida se refleje en nosotros; pero en Cristo Jesús
somos más que vencedores; amada Iglesia, vivamos la Fe y el Amor verdadero; con
la ayuda del Espíritu Santo, tenemos que morir a nuestro YO; y así, EL,
levantara el Hombre Nuevo, Jesús el Cristo manifestándose con poder en su Iglesia
verdadera; seremos uno con EL, sus hijos santos.
Comprendamos que Dios
estableció un orden de prioridades en su verdadera Iglesia y definitivamente el
primer lugar no lo ocupa el conocimiento de la letra, que tantas divisiones ha
creado a través de la historia de la Iglesia, sino el amor, la fe, la unidad en
el Espíritu, la justicia divina, y todo esto se resume en la obediencia
absoluta al Señor; EL es quien da las órdenes en la Iglesia; dejemos que El
Señor gobierne su Iglesia, entonces en Jesús el Cristo encontraremos la
verdadera paz que todos anhelamos su Reino eterno. Meditemos cual es el mensaje
del Señor Jesús cuando comienza a predicar; observemos lo que el Espíritu nos
enseña en el Evangelio de Mateo 4:17; “Desde entonces comenzó Jesús a predicar
y a decir: Arrepentíos, porque el Reino de los cielos se ha acercado”. El Padre
celestial es el Rey de Reyes y Señor de Señores; y también lo es Jesús el
Cristo; 1 de Timoteo 6:11-19; Apocalipsis 19:16.
Sigamos escudriñando las Sagradas
Escrituras bajo la Unción del Espíritu que es quien nos revela la palabra
escrita en la Biblia, eso dice: 1 de Juan 2-27; Juan 14:26; Juan 16-13; 1 de
Corintios 2:10-16; desafortunadamente, los Teólogos, Eruditos, y Estudiosos de
la Biblia, no han creído en la revelación del Espíritu Santo y han creado el
caos que existe hoy en día, manoseando y pervirtiendo las Sagradas Escrituras.
Manipulan las congregaciones con un conocimiento falso; solo letra, la
Teología, no es de Dios; fue inventada por la soberbia del conocimiento de los
hombres, para controlar sus instituciones y tergiversar la verdad. Predican
pero no ponen en práctica lo que predican, pura palabrería.
Sigamos orando sin cesar
para que El Señor nos siga iluminando con el conocimiento revelado; es el
Espíritu Santo quien nos enseña todas las cosas; 1de Juan 2:27; Juan 6:45; Juan
14:26; Juan 16:13; Efesios 1:17; Gálatas 1:11-13; Romanos 12:16; Isaías 54:13.
Miremos en Lucas 4:43; “Pero EL les dijo: Es necesario que a otras ciudades
anuncie el Evangelio del Reino; porque para eso he sido enviado”. Amada
Iglesia; entendamos guiados por el Espíritu, lo que Jesús El Cristo dijo:
“Porque para esto he sido enviado”. Nuestro amado Padre Celestial envío a su
amado Hijo Jesús el Cristo para anunciar el Evangelio del Reino, esa fue su
misión principal; EL debe primero que todo Reinar en nuestros corazones, para
que EL pueda regresar y acabar con el pecado y la maldad de este mundo en
tinieblas; entonces Reinara con nosotros, los verdaderos hijos de Dios, su
Iglesia Gloriosa por mil años aquí en la tierra y después en la Nueva Jerusalén
por toda la eternidad. Juan el Bautista estaba predestinado para Bautizar al
Señor Jesús y proclamar el Reino de los Cielos. Sigamos escudriñando las
Sagradas Escrituras en oración y que sea la Unción quien nos enseñe todas las
cosas, miremos lo que dice el Evangelio de Marcos 1:14-15; “Después que Juan
fue encarcelado, Jesús vino a Galilea predicando el Evangelio del Reino de
Dios, diciendo: El tiempo se ha cumplido, y el Reino de Dios se ha acercado;
arrepentíos, y creed en el Evangelio”. Arrepentíos, un paso fundamental que
debe dar la Iglesia, y que el Señor tenga misericordia de nosotros.
Sigamos escudriñando las
Escrituras y observemos lo que está escrito en Mateo 9:35; “Recorría Jesús
todas las ciudades y aldeas enseñando en las Sinagogas de ellos, y predicando
el Evangelio del Reino y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo”.
La palabra Profética de Jesús, cuando predicaba el Evangelio del Reino, estaba
siempre acompañada del poder de Dios. Jesús el Cristo debe Reinar en nuestros
corazones en santidad para que EL, pueda regresar y tomarse a sí mismo, su
Iglesia Gloriosa; Juan 14:3; Jesús es el Esposo y la Iglesia será la Esposa.
Entonces EL establecerá su Reino aquí en la tierra; antes que el Padre venga
con su Esposa, la Nueva Jerusalén.
Sigamos escudriñando las
Escrituras como lo hacían los discípulos de Berea, en Lucas 8:1; la palabra
escrita de Dios nos dice: “Aconteció después que Jesús iba por todas las
ciudades y aldeas predicando y anunciando el Evangelio del Reino de Dios y los
doce con EL”. La obra de la Iglesia Gloriosa sobre la tierra en estos tiempos
finales, consiste en Predicar el Evangelio del Reino y prepararnos en santidad
para que Jesús el Cristo regrese a establecer su Reino aquí en la tierra.
Toda la obra de la Iglesia
se rige por el principio del Reino. Desafortunadamente las Iglesias Apostatas,
lo que han hecho es comercializar la Palabra de Dios, con el absurdo Evangelio
de la prosperidad, creando así sus propios Reinos, que muy pronto se
derrumbaran, Apocalipsis 18:2-24; cumpliéndose así, la Palabra Profética. Nunca
olvidemos que el Testimonio de Jesús es el Espíritu de la Profecía; Apocalipsis
19:10.
EL Señor vino a restaurar lo
que se había perdido, Mateo 18:11; Lucas 19:10; Eclesiastés 1:9-11; 3:14-15;
con su muerte en la Cruz nos redimió de todos nuestros pecados y nos hizo Reyes
y Sacerdotes y Reinaremos con EL en su Reino Eterno; si Dios restaurara su
Reino. Recordemos la oración que nos enseño Jesús; EL Padre Nuestro; tomemos
conciencia de lo que estamos pidiendo; “Venga tu Reino, hágase tu voluntad,
como en el cielo, así también en la tierra”. Lucas 11:2; Mateo 6:10. Es hora
que la Iglesia en santidad y de rodillas en oración profunda, escuche la voz de
Dios; y obedezca sus órdenes Divinas; 2 Corintios 7:1; Hebreos 12:14.
Amada Iglesia de Dios,
preparémonos como sus vencedores, en santidad, para que el Señor Jesús nos
levante como un solo hombre, el Hijo Varón, el Cristo colectivo; Jesús
manifestándose en cada uno de nosotros; El Glorioso Ejército de Dios; Joel:
2:1-11; Apocalipsis, 7:1-17; 11:1-13.
Y entonces EL se
manifestara en nosotros con poder, el mismo poder que se manifestó en Elías y
Moisés; seremos en santidad sus verdaderos Testigos, su pueblo escogido; y así
se cumplirá la Palabra Profética en Mateo 24:14; “Y será predicado este Evangelio del Reino en todo el mundo, para
testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin”. Compañeros de
milicia, miembros del Glorioso Ejercito de Dios, entonemos el nuevo cántico, de
los vencedores que están en la presencia del Cordero, vestidos de ropas blancas
y con palmas en las manos claman a gran voz: “Santo, Santo, Santo es el Señor
Dios Todopoderoso, El que era, El que es, y El que ha de venir”, Apocalipsis
4:8; “Digno eres de tomar el libro y de abrir sus sellos; porque tú fuiste
inmolado, y con tu sangre nos has redimido para Dios, de todo linaje y lengua y
pueblo y nación; y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes, y
reinaremos sobre la tierra”, Apocalipsis 5:9-10; “La salvación pertenece a
nuestro Dios que está sentado en el trono, y al cordero” Apocalipsis 7-10.
Amado Padre Celestial, te
pedimos en oración sincera que cada día nos des más Espíritu de Sabiduría y de
Revelación en el conocimiento de El Cristo, El es la verdad, y así podremos
comprender con claridad, Luz Divina, que el regreso de Jesús el Cristo al
Planeta Azul está muy próximo; y no olvidemos que el Señor Jesús nos dijo:
“Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán
saciados”; Mateo 5:6. Amada Iglesia de Dios, lo que necesitamos en estos
tiempos finales es el Conocimiento Revelado, no olvidemos nunca que el
conocimiento de la letra, envanece y divide, mas el amor edifica, 1 de
Corintios 8:1-3; el Evangelio es un misterio, Efesios 6:19; Colosenses 1:24:29;
y así Iluminados por el Espíritu predicaremos y proclamaremos el verdadero “Evangelio del Reino”, entonces su propósito para la Iglesia desde antes de la
fundación del mundo se cumplirá, en Cristo y llenos del Espíritu Santo,
destruiremos el Imperio de Satanás, heriremos y aplastaremos la cabeza de la
Serpiente bajo nuestros pies; Génesis 3:15; Romanos 16:20; Apocalipsis
19:11-21; y así en Santidad reinaremos con Jesús el Cristo por los siglos de
los siglos; Apocalipsis 20:1-10; 21:9-27; ven, Señor Jesús, ven pronto.
“La gracia de nuestro Señor
Jesús el Cristo sea con todos vosotros. Amén” Apocalipsis 22:21.
SEÑOR NUESTRO VEN.
MARANATHA.
Arcturo de Jesús
Guerrerosdedios8@hotmail.com
3 comentarios:
felicitaciónes hermano dios lo bendiga siga haci temos que movernos y prepararnos para la batalla final y armarnos con la armadura del espíritu ir y predicar a las plazas publicas mover el movimiento y prepararnos para el armeguedon
maranatha
dios lo bendiga
Muy buen aporte, los cristianos debemos estar preparados ya que vivimos en tiempos finales. Mantener la fe en Jesucristo y pelear la buena batalla, con su ayuda, es posible. Exitos
El hombre erdara la tierra amen
Publicar un comentario